La asociación entre las experiencias adversas en la infancia y la inflamación en pacientes con trastorno depresivo mayor

Antecedentes

La evidencia replicada ha documentado niveles elevados de citocinas proinflamatorias en personas con trastorno depresivo mayor (TDM). Sin embargo, el trauma infantil, un factor de riesgo bien establecido para el TDM, también ha demostrado afectar los sistemas inflamatorios por separado. Su efecto moderador potencial sobre la inflamación en el TDM ha sido investigado con menor frecuencia.

Métodos

Se realizó una búsqueda sistemática en las bases de datos PubMed, Google Scholar, Scopus, Web of Science y PsycINFO desde sus inicios hasta el 19 de junio de 2019. Se utilizó la cadena de búsqueda:
(Childhood trauma OR Adverse childhood experiences OR childhood abuse OR childhood rape OR physical abuse OR emotional abuse) AND (Inflammation OR inflammatory cytokines OR interleukin-6 OR tumor necrosis factor-alpha OR c-reactive protein) AND (Major Depressive Disorder OR Depression).

Resultados

Se identificaron nueve artículos que evaluaban biomarcadores inflamatorios en poblaciones con TDM y experiencias adversas en la infancia (ACE, por sus siglas en inglés). Ocho estudios evaluaron interleucina-6 (IL-6). Tres estudios evaluaron la proteína C-reactiva (CRP). Cinco estudios evaluaron el factor de necrosis tumoral alfa (TNF-α). Los efectos más sólidos se observaron con la IL-6: seis estudios informaron niveles significativamente elevados de IL-6 en pacientes con TDM y ACE en comparación con controles sanos y/o pacientes con TDM sin ACE. En contraste, solo tres estudios encontraron niveles significativamente elevados de TNF-α en la cohorte con TDM y ACE.
Por otro lado, no se observaron aumentos significativos en la CRP en esta población.

Limitaciones

La alta heterogeneidad metodológica entre los estudios limita la interpretación generalizable de los resultados.

Conclusión

Esta revisión sugiere que las personas con TDM y antecedentes de experiencias adversas en la infancia presentan niveles más altos de IL-6 en comparación con aquellas sin ACE o con controles sanos. Estos hallazgos plantean la posibilidad de que la inflamación observada en el TDM pueda ser, en parte, un epifenómeno de traumas infantiles previos. Se recomienda que futuras investigaciones exploren si los subgrupos con TDM y ACE tienen una mayor probabilidad de responder a intervenciones dirigidas al sistema inmunoinflamatorio.

Resumen elaborado por Cibermedicina

Para acceder al texto completo consulte las características de suscripción de la fuente original: https://www.sciencedirect.com/